sábado, 2 de xullo de 2011

QUEN QUERE A MARIANO?

En Andalucía e Galicia rebélanse contra a súa doutrina. A "The Economist" parécelle o típico galego e os seus colegas do PP europeo aféanlle que non apoie as medidas que ditan os conservadores. 
Resulta que Cospedal ía ser o modelo para todos os seus comilitones, pero xa hai discrepancias: reducir o Valedor do Pobo, suprimir o Consello de Contas, nanai. Do primeiro, menos contos e do outro ¡non me lies! Así llo dixeron en Andalucía e Galicia. E outros, menos comprometidos cos "peperos", xa anotaron que entre os plans da dereita en Castela-A Mancha está reducir organismos que poidan investigar ao poder. Mentres, en Estremadura, para gañar, Rajoy asubia e seguirán pagándose impostos polas transmisións. 
E por se isto fose pouco "The Economist" ve a Rajoy como "o típico galego do que hai que adiviñar as súas intencións", e como un señor dubitativo, aburrido, que gañará se perden os demais. Ademais do cabreo dos galegos, que non somos típicos -segundo os canons dos tópicos-, está o dos propios militantes do PP, que están ata o gorro (en Galicia ata a gaita) de contar cun señor que emociona menos que unha medusa e do que destaca unha máis que evidente falta de enerxía que lastra a súa figura en todas as enquisas. 
E, por se isto fose pouco, os seus compañeiros europeos (o grupo popular europeo) o han "posto a caldo" con claridade meridiana pola súa postura de non apoiar as medidas que ditan os propios conservadores (Sarkozy, Merkel, a derechota, imos) e que aquí aplica diligentemente o Goberno de Zapatero. Critican que o seu afán por chegar a Moncloa non deixe monicreque con cabeza nesta doente comunidade económica pilotada por banqueiros, financeiros e especuladores, habituais compañeiros de viaxe da derechona. 
Dixéronllo por señas e por carta, pois Mariano non puido asistir á reunión por atoparse malito, pero xa é de común coñecemento e obxecto de rechifla xeral. 
E é que por aí -polo estranxeiro de fóra- ninguén entende que se conseguiron retorcer o brazo á esquerda -bo ao PSOE- para obrigarlle a circular pola dereita, sexa esta -levantada polo flanco máis cavernícola- a que se opoña. 
E é que hai que volver preguntar ¿Quen quere a Mariano?

2 comentarios:

Anónimo dixo...

Pues los paladines y defensores del Sr. Rajoy ya pueden ir afinando el tiro. Porque lo que no es de recibo es que, a estas horas del baile, el líder de la oposición que se postula jefe de gobierno de la nación, sea incapaz, sino las lee, de exponer las medidas que tiene pensadas para combatir y luchar contra la crisis y el desempleo.
De todas formas, y sobre todo para que reflexionen aquellos que consideran que una mala exposición en público no presupone ser un mal gestor, recordar que al Sr. Rajoy ya lo conocemos como gestor en los gobiernos del Sr. Aznar, y su hoja de servicios no es, precisamente, brillante.

UN GALEGO dixo...

Lo de Rajoy es verdaderamente curioso, según los sondeos, en España puede haber en este momento del orden de diez millones de personas dispuestas a votarle en unas elecciones generales para que sea el próximo presidente del gobierno.
¿Quién quiere a Rajoy?
Rajoy es para mucha gente el mal menor, la única alternativa posible en este momento. Unos se taparán la nariz para meter su voto en la urna, otros lo harán porque consideran que es lo mas responsable, lo votará la derecha casi toda, como también una parte de la ultraderecha, vamos, quitando a su familia a sus amigos y a sus militantes que, supuestamente, lo votarán con cariño, la mayoría de la gente lo votará sin sentir un afecto exagerado por el, y aun así, será probablemente la opción mas votada, siempre según sondeos.
¿Qué cosa, no?
Algunas razones que pueden explicar esto:
Razón 1: cualquier cosa antes que Zapatero.
La situación económica, el elevado número de parados y su forma de gestionar la situación, ha provocado una sensación general de rechazo hacia el presidente, no solo en el electorado de derechas, que no lo iba a votar de todas formas, sino en simpatizantes, electores y miembros de su propio partido, no es este el sitio para analizar si justa o injustamente, porque estamos comentando la mala letra de Rajoy, esa criatura que se equivoca tanto, que lo quiere tan poca gente y que a pesar de todo, es el mas votado.
Razón 2: tampoco se puede decir que sea tan impresentable.
Mantiene su tontéz dentro de unos límites. Enerva a la izquierda y a algunos medios de la derecha, Libertad Digital y su pepito grillo Losantos por ejemplo que lo llama maricomplejines, como también a la mayoría de los medios de izquierda y en ocasiones hasta a los neutro. Sin embargo debe ser que para una amplia mayoría de ciudadanos esa torpeza en su manera de desenvolverse lo humaniza, o por lo menos no crea ese rechazo frontal que te lleve a decir yo a éste tío no lo voto ni harto de vino.
Creo que el fenómeno Rajoy, es sintomático del peculiar momento político que vivimos.
Vaya tela.
Imagino que habrá mas razones pero no tengo mas ganas de pensar.