mércores, 23 de maio de 2012

NOBEIS DE ECONOMÍA

O que diga que sabe de economía mente. Nin un só dos premios Nobel atinó a avisarnos do que se nos viña encima. Do mesmo xeito que, nestes momentos, eses mesmos sisudos teóricos debátense en dous bandos enfrontados sobre cal é a mellor solución para pasar páxina da crise. Mentres uns alíñanse coa Merkel e a súa austeridade, outros apostan por dar un pouco de correa aos países máis castigados.
Con este panorama non resulta estraño que o mesmo día que Moody's rebaixa a cualificación de dezaseis bancos a Bolsa suba grazas ao tirón das entidades crediticias. A única explicación plausible a este feito é que os mercados esperaban ansiosos saber que faría a axencia de cualificación para facer exactamente o contrario. Á fin e ao cabo, nin Moody's nin ningunha outra rebaixaron a cualificación a ninguén no planeta nin tan sequera uns minutos antes de que estalase a crise.
E, tamén neste contexto, resulta ata normal que o Goberno español, preocupado ultimamente en dar unha imaxe de máxima solvencia, encargue un informe independente sobre o estado de Bankia a Goldman Sachs, o que fose banco de investimento e que está na xénese mesma do crack que aínda nos ten dobrados. De igual modo, a resposta dos chamados mercados non se fixo esperar e as accións da entidade, que ata onte tiñan menos valor que un euro grego, rebotaron e subiron ata un 20% nunha sesión.
Os españois estamos aprendendo economía a marchas forzadas. Conceptos como o "corecapital", a "débeda soberana" ou a "deflación" forman xa parte do coñecemento popular e déixanse escoitar con total naturalidade no taxi, o bar ou a cola da panadería. Ata Belén Esteban as solta con naturalidade mentres intenta aprender a colgarse dunha barra de striptease. E é que, ao final, isto é o que nos queda. España só é fértil en premios Nobel de literatura e no resto dos campos o noso palmarés limítase a dous de medicamento, un deles compartido cos norteamericanos (xa que eles pagaban os experimentos de Severo Ochoa, o mérito consideran que é seu).
Con todo, desde agora hai toda unha lexión de candidatos a obter o galardón en Economía e o mellor é que non son alumnos de Yale nin de Oxford, nin tan sequera da Universidade da Coruña, os candidatos son cidadáns capaces de sobrevivir con salarios minúsculos a unha hipoteca, os prazos de coche, o cole do nene, as cañitas do venres pola tarde e, ata, de cando en cando, encher o depósito do utilitario e ata comer.
Millóns de españois demostraron a súa valía para ser distinguidos cun Nobel, ou cando menos, con algunha dirección xeral nunha axencia de cualificación.

1 comentario:

DOREMA dixo...

• La crisis ya no es solo financiera. Es crisis económica mundial y es crisis de civilización. Es crisis multisistémica y es crisis de confianza.

• La crisis será mucho más larga de lo queremos oír, y mucho más cruel de lo que creemos. Tampoco ha tocado fondo, seguirá más dura y más cruel.

• El sector financiero, por su misma razón de ser, no puede actuar libre y desreguladamente. Se viene el re-diseño y construcción de un nuevo orden financiero y una nueva arquitectura internacional.

• La ciencia económica se encuentra en el umbral de una nueva era, y los economistas, aprendiendo mucho más de lo que, hasta ahora, se ha hecho. Muchos viejos paradigmas caerán, como cayó el Coloso de Rodas y el Muro de Berlín, muy a pesar de lo que digan y piensen los economistas ortodoxos. Estaremos asistiendo al mejor laboratorio de estudios e investigaciones conocido, hasta el momento: el planeta entero.

• Pero, también, será necesario enfatizar, que no existen soluciones simples en economía, por la simple razón de que tiene la complejidad de una ciencia social y política. Cada país, deberá experimentar las soluciones económicas a su propia medida, pero con visión internacional y regional.

• Se viene la necesidad de una nueva visión de políticas económicas: Proteger las economías endógenas, fortalecer el consumo interno, al tiempo de no perder los avances en la globalización. ¿Quién encontrará el término medio de la sabiduría, en estos escenarios tan complicados?

• Las reuniones mundiales de concertación, estarán a la orden del día. Será imposible resolver la crisis desde una sola óptica y desde un solo país. Estamos ante una crisis de riesgo sistémico y una parte importante de las soluciones para aplicar, deberán ser concertadas en los niveles internacionales.

• Los economistas y los políticos, deberán trabajar en equipo. Ninguno saldrá solo adelante. No hay ninguna posibilidad de que las soluciones vengan de uno o de otro lado, por la simple razón de que todas las medidas estarán basadas en la política fiscal y monetaria. Ambas dependientes, totalmente, de la órbita de la política y del Estado. Ciertamente, los gobiernos se encontrarán con las manos amarradas, los políticos debatiendo los temas económicos de urgencia con total ignorancia y las sociedades, en medio de las garras de una profunda recesión y del peor de todos impuestos de una depresión: el más cruel y desgarrador desempleo, el que será, sin lugar a dudas, el detonante de todas las formas de ingobernabilidad, premisa que ninguno de los gobiernos quiere aceptar, pero que será una realidad.