Ante semellante indecisión, ante tanta incerteza e ante esta clamorosa ausencia de perspectivas prometedoras, só nos queda a ironía e a visión humorística da crua realidade (por certo, fíxome moita graza a metáfora do dentista, para reflectir o medo atávico de Rajoy a comparecer ante o Congreso).
Ben, bromas á parte, estamos a atravesar unhas semanas dominadas por unha incerteza case absoluta, nas que un chega mesmo a dubidar de se o propio Goberno sabe cara a onde nos diriximos. O do rescate é como un conto interminable. Sucédense declaracións en todos os niveis e estamentos, europeos e españois, remóvese os proles e as contras da cuestión ata a náusea, e a decisión final posponse indefinidamente, só Deus sabe ata cando. Mentres tanto, o rescate específico á banca, sobre o que aparentemente se tomou xa unha decisión europea antes do verán, se non me equivoco, dorme o sono dos xustos.
Ben, bromas á parte, estamos a atravesar unhas semanas dominadas por unha incerteza case absoluta, nas que un chega mesmo a dubidar de se o propio Goberno sabe cara a onde nos diriximos. O do rescate é como un conto interminable. Sucédense declaracións en todos os niveis e estamentos, europeos e españois, remóvese os proles e as contras da cuestión ata a náusea, e a decisión final posponse indefinidamente, só Deus sabe ata cando. Mentres tanto, o rescate específico á banca, sobre o que aparentemente se tomou xa unha decisión europea antes do verán, se non me equivoco, dorme o sono dos xustos.
¿A que espera Rajoy, ás eleccións galegas e vascas, a ver se as primeiras polo menos lle son favorables? ¿Ou ben espera ordes da "xefa" de toda esta lea, Fräulein Merkel, que tampouco se caracteriza pola súa axilidade á hora de decidir e resolver problemas?
A situación agrávase ante as novas previsións do FMI sobre a evolución do noso PIB, con uan caída prevista do 1.5% para 2013, inscrita nunha situación mundial de estancamento. A cousa pinta moi mal, porque se a economía produtiva non só non crece, senón que se contrae, francamente non sei de que imos vivir. Sinto ser tan pesimista, pero moi negros nuboeiros aparecen no horizonte. Imponse urxentemente un novo modelo de desenvolvemento e crecemento, e non podemos esperar nada nin do noso sector financeiro nin das nosas grandes empresas, que miran para outro lado e se envorcan noutros países e continentes, mentres destrúen emprego aquí, en España, incerteza. DOREMA
3 comentarios:
Que triste, si quieren subir los impuestos y no enfrentarse al problema del recorte del gasto que deben acometer que se presenten por un partido que abandere tal ideario, pero subir la presion fiscal una vez y otra mas sin ver recortes de calado en la estructura mastodontica de las administraciones me parece un atropello. Ademas como todos sabran sucesiones y donaciones solo lo paga la clase media y los pobres, que por cierto sus antecesores ya pagaron IRPF por el dinero con el cual compraron esos bienes. Se ha perdido la ideologia en pro de mantenerse en el puesto se esquilme a quien se esquilme.
Ahora que la crisis global del capital se traduce en una incontrolada crisis de la deuda, se comienza a demostrar la gravedad de esta incompatibilidad entre lo monetario y lo fiscal. Es así que el Estado español, sin ningún control sobre la política monetaria, sin la capacidad por tanto de emitir dinero que dinamice el mercado para financiarse, está preso de la colocación de bonos de deuda en los mercados financieros en los que, los especuladores financieros ganan muchísimo dinero, apostando a la baja de la deuda española y obligando al pago de intereses cada vez más altos que ya rondan el 7% y que los hace definitivamente insostenibles. Por otra parte ante la presión de solventar esta deuda cara y creciente, en política fiscal se ha decidido por el camino de, por una parte subir los impuestos, fundamentalmente los que más afectan a las familias tal es el caso del IRPF o el IVA y, además incumplir flagrantemente obligaciones en materia sanitaria, educativa y de servicios sociales por el camino de brutales recortes que ponen en peligro la sostenibilidad de sistemas que son responsabilidad del Estado. En una política impuesta evidentemente desde Europa, pero que va más allá inclusive de las tesis del ultraliberalismo, al combinar perversamente la privatización de todo lo público con la subida de impuestos.
Utilizan nuestro dinero, el de los contribuyentes, para pagar la deuda privada de los bancos. Por definición esa deuda es ilegítima y debe acarrear, no solo el impago, sino también responsabilidades administrativas y penales para los responsables banqueros y políticos que han permitido estos rescates. Lo que no implica que toda la deuda sea ilegítima y por ello cada vez más estamentos exigen una auditoría imparcial de la deuda. Auditoría a la que bancos y estados se han opuesto y se van van a oponer como si les fuera la vida en ello. ¿Será debido a que, efectivamente, les va?. Saludos a todos.
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